San Francisco 49ers logró una impresionante remontada el pasado domingo al recuperarse de una desventaja de 17 puntos para derrotar a los Detroit Lions por 34-31 en la final de la Conferencia Nacional (NFC). Esta victoria les aseguró un lugar en el Super Bowl, donde se enfrentarán a los actuales campeones, los Kansas City Chiefs.
Tras perder consecutivamente en las finales de la NFC en los dos últimos años, los 49ers tendrán la oportunidad de competir en el Super Bowl LVIII contra los Chiefs el 11 de febrero en el Allegiant Stadium de Las Vegas, Nevada.
El equipo experimentó un primer tiempo difícil en el que se encontraban abajo en el marcador 7-24. Sin embargo, en la segunda mitad, protagonizaron una actuación destacada al anotar 27 puntos, liderados por la destacada actuación de Brock Purdy, quien acumuló 267 yardas y lanzó un pase de anotación. Además, Christian McCaffrey brilló con 90 yardas en carreras y dos touchdowns terrestres.
El conjunto dirigido por el entrenador Dan Campbell sorprendió en el primer cuarto con su ataque terrestre, que superó la defensa de San Francisco. En su primera serie, utilizaron una estrategia engañosa con un juego reversible, donde Jameson Williams escapó 42 yardas para anotar y tomar la delantera 0-7. Luego, ampliaron la ventaja a 0-14 con un acarreo de David Montgomery en una serie de 11 jugadas que recorrieron 62 yardas.
Los 49ers reaccionaron en el inicio del segundo periodo gracias a Christian McCaffrey, quien llevó la ofensiva hasta la zona de anotación para reducir la brecha a 7
-14.