El huracán Beryl se ha debilitado a una tormenta tropical, según el último reporte del Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos (CNH). Este lunes, la tormenta se encontraba a 30 kilómetros al noroeste de Houston, en Texas.
Con vientos máximos sostenidos de 110 kilómetros por hora, Beryl continúa su desplazamiento lentamente hacia el interior de Texas, generando preocupación en las comunidades afectadas.
Se pronostica que Beryl se convierta en un ciclón postropical el martes, lo que implica que perderá aún más fuerza. Sin embargo, los efectos del huracán ya se sienten con fuerza en Texas, donde se reportan lluvias intensas, inundaciones y destrozos en varias áreas.
Las autoridades locales han emitido alertas y recomendaciones para la población, instándoles a mantenerse seguros y preparados ante posibles emergencias.