En una reciente conferencia de prensa, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, ha dejado en claro que su gobierno no permitirá la intervención de ninguna fuerza armada extranjera en territorio nacional para combatir el narcotráfico.
El mandatario mexicano ha hecho esta declaración en respuesta a la propuesta del Partido Republicano de Estados Unidos para que las fuerzas armadas de ese país intervengan en México con el fin de combatir el tráfico de drogas.
López Obrador ha calificado esta propuesta como una iniciativa irresponsable y una ofensa al pueblo mexicano, además de una falta de respeto a la independencia y soberanía de México.
El presidente ha enfatizado que la solución al problema del narcotráfico no pasa por la intervención de fuerzas extranjeras, sino por el fortalecimiento de las instituciones y el combate a la corrupción en México.
El rechazo a la intervención extranjera en asuntos internos de México es una postura que ha sido respaldada por una gran parte de la población y líderes políticos del país. López Obrador ha dejado claro que su gobierno no cederá a ninguna presión externa en este sentido y que trabajará incansablemente para resolver el problema del narcotráfico de manera autónoma.